Viviendo un sueño o una pesadilla, pero vivendo al fin y al cabo
generando decisiones a cada paso que doy
escuchando el silencio, mirando en la oscuridad, calentandome con el frío.
El destino lo escribimos con cada paso que damos, cada decisión, cada palabra, cada gesto, cada mirada, cada caricia, cada abrazo, cada silencio, cada guiño, cada beso, cada lágrima, cada pensamiento, cada deseo...
Vivo.
6 mar 2010
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1 comentario:
Y sin embargo aún creando nosotros nuestro propio destino, este nunca dejará de sorprendernos.
A veces pienso que el destino realmente no existe, que este universo determinista solo es una ilusión, que realmente estamos en una nube mecida por el viento del azar.
Entonces te miro a los ojos y recuerdo que ningún azar podría crear una belleza como tú que quisiera estar conmigo y pienso que el determinismo nos ha unido y siento que todo toma un sentido.
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